martes, 4 de noviembre de 2008

Paro

Hay que tener huevos.

Llevo dos años trabajando en una empresa que se dedica a algo muy, muy específico. Mi hermano trabajaba en la competencia, y su empresa se trasladaba a un pueblo de los alrededores , demasiado lejos, por lo que hace seis meses hablé con los dueños de la empresa donde trabajo para decirles que si les interesaría traerse a alguien de la competencia y además conseguir un trabajador cualificado, al que no tendrían que formar. El gerente como loco, claro: Que se venga, que se venga, pero como no me lo has dicho antes, etc, etc.
Pues bien, 6 meses después y un contrato renovado, le dicen que este último contrato no se lo renuevan porque en la empresa ya no hacen indefinidos.

Todo el mundo en la empresa se ha quedado de piedra.

Valientes hijos de puta.

No hay comentarios: